30.7.11

La consigna.

Un avatar que me identifica en distintos lugares virtuales es esa florcita celeste, chiquitita chiquitita y que tiene un nombre con magia.


Las 'No me olvides' son particularmente bonitas, particularmente simples y tienen  como unos pelitos que hacen que se peguen a la tela. Entonces, el nombre se vuelve consigna cuando se le regala la florcita a alguien y esa persona debe llevarla puesta en la ropa.

Al margen de toda la 'mística' de la historia, las No me olvides están ligadas a mi por una cuestión adicional. 

Cuando yo era chica, mi abuela tenía en su casa macetas LLENAS de no me olvides y yo, a escondidas, me agarraba manojos. Entonces después rápido (para que no se sequen)  las  repartía  repitiendo la consigna a cada destinatario.

Un poco en juego. Un poco en serio.
Como con ganas de que sea así:


No me olvides.

No hay comentarios.: